La limpieza de la casa es uno de los hándicaps a los que se enfrentan las familias de hoy en día. Si los dos miembros de la pareja están trabajando, es complicado mantener la casa impecable, al menos como lo tenían nuestras madres. Menos mal que existen los servicios de limpieza de domicilios.
Para contratar un servicio de limpieza, bien sea una empresa o una limpiadora que trabaje por horas, hay que valorar varios criterios. Los gerentes de Servinet, una empresa de limpieza que lleva prestando servicios integrales en el área metropolitana de Barcelona desde hace 50 años, tanto en empresas como en domicilios particulares, opinan que lo más importante es la profesionalidad y también el hecho de prestar un servicio completo, que incluya la limpieza de cocinas y baños, limpieza de cristales, limpieza a fondo, etc.
La limpieza de una casa es necesaria, pero no nos vamos a engañar, es engorrosa. A nadie le apetece, el día que tiene libre en el trabajo, pegarse un tute para tener la casa perfecta. El cuerpo te pide otra cosa. Levantarte tarde, salir a tomar un café o una cerveza en una terraza y, si puedes, ir a comer a un restaurante.
Hacemos eso de la compra semanal porque nos lo tomamos como una alternativa de ocio. Bien, es cierto que tenemos que reponer la nevera, pero al tiempo que vamos al hipermercado del centro comercial, aprovechamos la tarde para darnos una vuelta por las tiendas o picamos algo en algún puesto del área de restauración.
La de discusiones que se han dado en las parejas por el tema de la limpieza de la casa. No es por machismo. Es porque el día que tienes de descanso lo quieres para descansar. Es por tu salud física y mental.
Para vivir más cómodo o cómoda, puedes invertir algo de dinero en contratar a alguien para que te eche una mano con la limpieza doméstica. Eso sí, ¿con qué criterios la contratas?
Criterios para contratar la limpieza adecuada.
Para contratar un servicio de limpieza para tu casa debes partir de tus circunstancias personales y familiares. No es lo mismo limpiar un piso de soltero, en el que el inquilino pasa todo el día fuera y solo va a casa para dormir, que una casa en la que vive una familia con niños pequeños.
Aun así, estos son algunos criterios que debes barajar a la hora de contratar a alguien para que te ayude con la limpieza de tu hogar:
- Experiencia y referencias: Buscar un servicio de limpieza con experiencia probada y buenas referencias garantiza un trabajo de calidad. La reputación es un indicador clave de la fiabilidad del servicio. Muchos acostumbramos a contratar a personas o empresas basándonos en recomendaciones de familiares o amigos.
- Personal certificado y de confianza: Asegurarse de que el personal de limpieza sea de confianza es fundamental. Verificar antecedentes y referencias individuales garantiza la seguridad de la vivienda y la integridad de los objetos personales. No olvides que entras a una persona extraña dentro de tu hogar.
- Flexibilidad en los servicios: Optar por un servicio que ofrezca flexibilidad permite adaptarse a las necesidades específicas de tu casa. Una semana puede ser que necesitas que hagan una limpieza rutinaria, mientras que en otro momento, ante la llegada de visitas, puede ser que requieras una limpieza más profunda.
- Empleo de productos de calidad: Otro de los factores a tener en cuenta es que el limpiador o la empresa utilice productos de limpieza de calidad y equipos de limpieza que aseguren resultados efectivos. En ocasiones, son los propios limpiadores los que solicitan a la familia que les contrata que les provea de los artículos de limpieza necesarios. Mientras que otras veces, sobre todo en el caso de empresas de limpieza, suelen venir con el equipamiento.
- Póliza de seguro de responsabilidad civil: Contratar un servicio con una póliza de seguro de responsabilidad civil proporciona protección en caso de accidentes o daños durante la limpieza. Esto brinda tranquilidad a la familia y evita posibles complicaciones legales.
- Disponibilidad horaria: La flexibilidad en cuanto a horarios y la facilidad para ajustarse a la rutina del cliente son aspectos importantes. Un servicio que se adapte a los tiempos y necesidades individuales facilita una experiencia más cómoda.
- Métodos de pago transparentes: Este es otro aspecto a tener en cuenta. Debe quedar claro desde el principio cuánto cuesta la hora de trabajo. Así como si hay que pagar algún extra en caso de limpieza a fondo o limpieza de cristales. Negociar precios cerrados puede resultar una opción interesante para nosotros, ya que nos evitaremos sorpresas.
- Compromiso con la sostenibilidad: Optar por un servicio comprometido con prácticas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente demuestra responsabilidad. El uso de productos ecológicos y prácticas de limpieza conscientes, como el reciclado de los residuos, son servicios cada vez más valorados.
¿Cuánto cuesta la limpieza de una casa?
Esta es una de las preguntas que se formulan la mayoría de familias o de particulares a la hora de contratar a un profesional para la limpieza de un domicilio.
El precio, por lo general, se suele pagar en función de una tarifa por hora de trabajo. El portal de empleo Cronoshare aclara que la tarifa suele determinarse en función de varios criterios.
Uno de ellos es la distancia. Si el limpiador tiene que desplazarse para llegar al domicilio del cliente, es posible que dentro del precio del servicio incluya un plus de desplazamiento.
Las horas de trabajo y la sistematicidad del mismo pueden reducir el coste por hora, abaratando, por consiguiente, el servicio. Si contratamos a alguien para que nos venga a limpiar un día fijo cada semana o le solicitamos un servicio que le puede ocupar una jornada completa de trabajo (8 horas), siempre podemos negociar una rebaja que se traduce en el cómputo del precio por hora.
La especialización del trabajo es otro factor que influye en el precio. La limpieza integral de los cristales de una casa o la limpieza a fondo de la cocina, suelen ser más caros que una limpieza rutinaria.
Por último, otro factor determinante es la ciudad o zona en la que se trabaja. No se cobran las mismas tarifas en unas ciudades que en otras.
Así, por ejemplo, la hora de trabajo en Madrid y en Barcelona oscila entre los 9 y los 18 €. En Valencia y Sevilla, sin embargo, es más barato. Puedes encontrar profesionales que cobre 8 € la hora, y en Sevilla, rara vez se encuentra un servicio que supere los 15 € la hora.
La parte de España donde más cara sale la limpieza a domicilio es en Euskadi. En Bilbao y en Donosti (San Sebastián) está socialmente admitido que la hora de limpieza doméstica no baja de los 10 €, pudiendo superar sin problemas los 18 € por hora.
En el precio del servicio influye el nivel de precios generales (nivel de vida) de la zona.
¿Contratar a una limpiadora o una empresa de limpieza?
El portal de noticias Murcia.com opina que es erróneo quedarnos solo en el precio. Comparar varios anuncios y contratar a la persona que menos nos cobra por limpiarnos la casa puede resultar contraproducente. Debemos anteponer al precio otros criterios como la seguridad y la satisfacción del servicio. Es aquí donde cobra sentido la comparación entre un particular y una empresa.
Una empresa de limpieza te garantiza que el servicio contratado se va a realizar con independencia de las circunstancias personales de la limpiadora. Si tenemos contratada a una señora para que nos venga a limpiar la casa una vez a la semana y cae enferma, esa semana no limpia, o lo hace cuando se recupere. Lo mismo sucede si le surge un imprevisto personal.
Esto no pasa con las empresas de limpieza. Nosotros hemos contratado a una empresa y esta envía a la trabajadora que tiene disponible. Si la trabajadora que habitualmente va a nuestro domicilio, esa semana no puede, la empresa envía a otra operaria de su plantilla para que preste el servicio.
Otro tema importante es la protección del trabajador. En teoría, todo trabajador debería estar dado de alta y cotizando en la Seguridad Social. Esto no se da en términos absolutos en la limpieza doméstica, donde existe un alto índice de economía sumergida. A una familia que contrata unas pocas horas a la semana a una limpiadora doméstica no le sale a cuenta legalizarla. Le saldría bastante cara la limpieza.
Baste con que la limpiadora se haya caído de una escalera, mientras nos limpiaba y se descubra que estaba trabajando en nuestra casa, que nos podemos meter en un lío bastante serio.
Con una empresa de limpieza esto no pasa. Todas las trabajadoras tienen su contrato de trabajo y están cotizando en la Seguridad Social. Contratamos los servicios de una empresa, pero no tenemos que responsabilizarnos de los trabajadores.
Puede ser que contratar a una empresa nos salga más caro que a un particular, pero la efectividad y seguridad del servicio es indudablemente superior.